El calabacín, uno de los miembros más versátiles de la familia de las calabazas, se puede asar con limón y ajo, empanar y hornear, dar forma de espiral tipo “fideos” o cortar en rodajas y plegar tipo ravioles.
Agregue esta receta sin cocción a su lista de aperitivos rápidos, almuerzos ligeros o cenas frías.
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Rinde 4 porciones
Corte los extremos de cada calabacín. Con un pelador de verduras o mandolina, corte cada calabacín a lo largo en tiras delgadas y planas. Coloque las tiras en un plato forrado con toalla de papel y reserve mientras prepara el resto de los ingredientes.
En un tazón mediano, mezcle el queso crema ligero, la salsa sriracha y el jugo de lima. Mezcle hasta obtener una consistencia suave.
Armado de los rollos: Sobre una tabla para cortar, coloque una tira de calabacín con el lado corto hacia usted. Esparza de manera uniforme sobre el calabacín una capa delgada de queso crema. Cubra el extremo más cercano a usted con una pizca de cangrejo o camarones (opcional), zanahorias, aguacate, pepino y brotes de frijoles. Enrolle firmemente cada tira de calabacín, comenzando por el extremo más cercano a usted. Repita con los ingredientes restantes. Espolvoree los rollos terminados con semillas de sésamo y masago, rocíe con sriracha (opcional) y sirva.
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