8 pasos para probar el yoga intencional matutino

Para empezar, póngase de pie y respire hondo.

Encuentre un lugar con espacio suficiente como para que pueda mantener los brazos extendidos a ambos lados. Apoye los brazos a ambos lados del cuerpo, con las palmas hacia afuera. A medida que inhale, lleve los brazos por encima de la cabeza, alargando los dedos. Exhale, presionando las palmas entre sí y poniéndolas sobre el corazón.

Use la respiración y los movimientos para alejar la energía negativa.

Inhale mientras junta las palmas de las manos en el corazón. Exhale mientras abre las palmas de las manos y las orienta hacia afuera para eliminar la energía negativa. Inhale mientras lleva los dedos por encima de la cabeza. Exhale mientras dobla los codos y mueve los brazos a cada lado del cuerpo, con las palmas hacia el techo. Abra el corazón intencionadamente.

Use la respiración y los movimientos para acumular energía positiva.

Inhale y estire las puntas de los dedos. Exhale, extienda los dedos y una las manos delante de usted. Continúe exhalando mientras presiona las palmas de las manos y las lleva al corazón.

Repita los pasos 1 a 3 de nuevo.

Continúe inhalando y exhalando mientras practica estos movimientos.

Estire los lados derecho e izquierdo.

Inhale y lleve ambos brazos hacia arriba. Sostenga la muñeca izquierda con la mano derecha y exhale mientras se inclina hacia la derecha. Mire hacia arriba desde debajo del brazo izquierdo. Inhale y enderécese, luego repita en el otro lado.

Estiramiento y giro.

Inhale y lleve las manos por encima de la cabeza. Exhale mientras dobla los codos y mueve los brazos a cada lado del cuerpo, con las palmas hacia el techo. Estire los brazos e inhale, lleve las manos por encima de la cabeza. Baje los brazos con las palmas hacia el suelo. Sienta el estiramiento hasta los pulgares. Exhale y gire hacia la derecha con los brazos extendidos. Mire por encima del hombro derecho, hacia las puntas de los dedos de la mano derecha. Intente mantener las caderas apuntando hacia adelante. Inhale y gire hacia la izquierda, mire sobre las puntas de los dedos de la mano izquierda. Exhale y gire un poco más.

Vuelva al centro y observe cómo se siente.

Inhale y lleve las puntas de los dedos por encima de la cabeza. Exhale, presionando las palmas entre sí y poniéndolas sobre el corazón. Respire unas cuantas veces en esta posición y note que el corazón late un poco más rápido. Perciba cómo puede sentirse un poco más alto y más conectado a la tierra a través de los pies.

Mientras está de pie, cierre los ojos y establezca sus intenciones.

Respire unas cuantas veces y pregúntese:

• ¿Qué lo trajo aquí?
• ¿Cómo puede estar aquí, completamente presente en cada momento?
• ¿Cómo puede estar presente intencionalmente con cada respiración?